Dicen los
analistas que "Estados
Unidos afrontará en el
corto plazo el problema de la
falta de petróleo, carbón
y energía eléctrica
para los próximos 20
años". El país
norteamericano esta abocado
a elevar su capacidad de producción,
pero ¿será esto
suficiente ante el aumento del
consumo interno?.
Pareciera
que no. Tendrán la necesidad
de importar estos insumos.
En esta guerra
contra Irak buscaron un pretexto
infantil
para apoderarse de los recursos
que les hace falta.
Michael Klare,
investigador de Hampshire College,
dice que EE.UU. hoy recibe alrededor
del 53 por ciento de sus requerimientos
energéticos de fuentes
extranjeras, y para el 2020
se prevé que esa cifra
se elevará a 62 por ciento.
Este es el origen del Plan Energético
de la Administración
Bush que prevé un incremento
notable en las importaciones
de petróleo. En este
caso en particular Bush está
interesado tanto en los pozos
de Oriente Medio, como en los
de Venezuela, Brasil, México
y Colombia.
Nuestro país
¿está a salvo
de las apetencias yankees?.
No debemos ser tan ingenuos
de creerlo. Si a corto plazo
no estamos en sus planes de
"colonialización"
ya han considerado a nuestras
reservas como posibles de apropiarse.
El ex presidente
Arturo Illia decía que:
"Ningún país
puede pensar en desarrollarse
sobre bases coloniales".
La Argentina
cuenta con los recursos más
apetecidos en el mundo, petróleo,
agua dulce (se llega a afirmar
que poseemos la mayor reserva
del mundo), minerales, entre
otros recursos naturales estratégicos
para el desarrollo y la supervivencia.
Hoy son los
pueblos árabes lo que
sufren el embate de esta política
norteamericana de apropiarse
de lo que les hace falta para
mantener su estándar
de vida. Mañana serán
otros, tal vez, y con probabilidad
Sudamérica, tal vez con
otros métodos, por ahora.
Todo dependerá
de la sumisión de los
gobernantes de turno. Si son
fieles a la política
norteamericana y ceden a sus
pretensiones de aprovechamiento
de sus recursos, que lo harán
bajo figuras "pseudo democráticas"
o presuntamente legales, el
apropiamiento se hará
sin lanzar misiles. De lo contrario,
pasarán a ser gobiernos
nefastos, que se aprovechan
de su pueblo, que avasallan
la democracia y en consecuencia
deben ser "salvados"
de este oprobio por el país
amo mundial.
Y esto se
hará sin consultar a
quienes poblamos estas tierras,
estos bosques y poseemos estos
ríos, estos lagos, estas
riquezas.
¿Qué
nos queda a los argentinos para
detener esta ruin acción?
Debemos exigir
a nuestros gobernantes la correspondiente
participación del pueblo
en la toma de decisiones tan
importantes como las que relatamos,
prevista en nuestra Constitución.
Los hermanos
de la Patagonia nos dan el ejemplo.
Vienen luchando para evitar
que empresas extranjeras - en
este caso la Meridian Gold -
puedan apropiarse del oro de
las minas de Esquel, sin importarles
absolutamente el destino de
sus habitantes, ya que para
extraer este metal contaminarán
con cianuro (elemento que usarán
masivamente en la obtención
del metal) hasta las aguas del
río de las que se abastece
la población de Esquel.
Lucas Chiappe,
un conocido ambientalista y
defensor de nuestros derechos
territoriales expresa que "El
desarrollo planteado por la
minería a cielo abierto
significa lisa y llanamente
la transformación y devastación
de una gran cantidad de cerros
y valles, el riesgosísimo
transporte por mar y tierra
y la posterior utilización,
de miles de toneladas de cianuro
por día, la exposición
y liberación de metales
pesados a la atmósfera,
la tala rasa y la contaminación
de grandes porciones de bosques
nativos, la polución
y el agotamiento de muchos arroyos,
ríos y lagos, en suma,
la incalculable pérdida
de calidad de vida y de biodiversidad."
Y como ha
ocurrido históricamente,
estas entregas de patrimonio
argentino se realiza con la
connivencia de los que nos gobiernan.
Continuando
con la preocupación de
Lucas Chiappe este expresa:
"Esta sigilosa 'invasión'
de alto impacto ambiental, ha
estado preparándose desde
hace muchos años y tiene
como principal responsable a
la figura del ex-presidente
Menem, con la complicidad de
todos los senadores y diputados
que acataron las sugerencias
planteadas por las corporaciones
y modificaron, según
el libreto que les impusieron,
el código de minería:
Desde fijar las regalías
auríferas en un 2% del
valor del mineral "a boca
de mina" hasta llegar al
bochornoso acuerdo minero argentino-chileno
que no contempla la intangibilidad
de los Parques Nacionales y
sus "zonas de amortiguación",
ni las Áreas Naturales
Protegidas Provinciales y Municipales.
Otras de las
denuncias de este ambientalista,
que no nos sorprende, pero sí
nos indigna, es el tratamiento
que se da a estos grupos foráneos
que crean una iniquidad increíble
con los auténticos dueños
de estas riquezas, los argentinos.
Dice Lucas
Chiappe: "Todo este proceso,
que llevó años
de minuciosa preparación
y gestación, incluyó
por supuesto un capítulo
especial en donde las empresas
se acercaron a los funcionarios
de los gobiernos provinciales
y fueron tejiendo otras alianzas
que permitieron la aprobación
de leyes adicionales para aumentar
los beneficios de las corporaciones
hasta límites insospechados
(como la que aprobaron los legisladores
provinciales del Chubut cuando
decidieron eximirlos de los
impuestos a los sellos)."
El valor de
las audiencias públicas
El 23 de Marzo la ciudadanía
se expidió en un plebiscito
a todas luces histórico,
pese a que el 80% de la población
de la ciudad chubutense de Esquel,
dijo NO al emprendimiento como
éste no es vinculante,
la decisión del pueblo
puede burlarse. Y el gobierno
tendrá que respetar esta
votación. Que no ocurra
nuevamente como el caso de Corpus,
en Misiones, Laguna Yema, en
Formosa, por citar algunas de
estas audiencias públicas
que luego no son tenidas en
cuenta. Realmente vergonzoso.
Por razones
obvias, nuestros gobiernos,
pese a la obligación
y al derecho constitucional
que tenemos, jamás informa
de estas entregas del Patrimonio
Nacional.
Por intermedio
de las Redes de las organizaciones
ambientalistas nos enteramos
la mayoría de las veces
de estas tropelías. Pero
el común de los ciudadanos
no tiene acceso a esta información.
Otras veces,
noticias insólitas nos
alertan de jugosas operaciones
que realizan "los custodios
de los bienes nacionales",
como el caso de lo publicado
en el diario La Nación,
sobre una maderera que sospechosamente
sale en defensa de un bosque
tropical en la Argentina.
Este caso,
calificado de inusitado, consiste
en una demanda presentada ante
una corte de los Estados Unidos
contra la petrolera BP de "profanar"
San Pedrito. La demandante es
Candlewood Timber Group LLC,
empresa forestal con sede en
Nueva York, que posee un proyecto
forestal en nuestro país
y la demandada la BP Argentina
Exploratión Cop., filial
de la gigante petrolera británica
y Pan American Energy LLC, otra
firma argentina en la que BP
Argentina tiene una participación
mayoritaria.
Según
la denuncia, estas empresas
están causando daños
significativos al Bosque de
San Pedrito, en las faldas de
los Andes, en las proximidades
del límite con Bolivia.
Gracias a esta demanda nos enteramos
que la denunciante adquirió
100.000 hectáreas de
bosques en el país entre
1997 y 1998, incluyendo 28.000
hectáreas en el bosque
de San Pedrito.
Pareciera
que los políticos no
les interesa el tema. Es mas
importante para ellos alcanzar
el poder. Ante las próximas
elecciones presidenciales sobran
candidatos, pero faltan ideas,
honestidad, trabajo, creatividad,
sinceridad. De esta manera sus
gestiones nos llevarán
nuevamente al fracaso.
Carlos U. Leoni
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