Suecia se va a convertir en el primer país del mundo que cuenta con un tren de pasajeros que funciona exclusivamente con biogás.

Desarrollado por Svensk Biogas y con un coste de diez millones de coronas (1,08 millones de euros), el tren está previsto que se ponga en funcionamiento en septiembre, para recorrer la costa este de Suecia, entre Linköping y Västervik, con 54 pasajeros.

El biogás se genera cuando las bacterias degradan el material biológico en ausencia de oxígeno, en un proceso conocido como digestión anaeróbica. El biogás, una mezcla de metano y dióxido de carbono, es un combustible renovable que se produce a partir del tratamiento de residuos. Se puede utilizar casi todo el material orgánico, y el proceso ocurre de forma natural en el sistema digestivo, ciénagas, depósitos de basura, fosas sépticas y en la Tundra Ártica, la región sin bosques del Polo Norte entre la capa de hielo y la línea de árboles, con suelo helado y de escasa vegetación.

El tren puede recorrer una distancia de 600 kilómetros con sus reservas llenas y llega a alcanzar una velocidad máxima de 130 kilómetros por hora.

Suecia cuenta ya con 779 autobuses de biogás y más de 4.500 coches que funcionan con una mezcla de petróleo y bien biogás o gas natural.