barrameda.com.ar - un puente hacia contenidos originales -   aca
barrameda.com.ar - un puente hacia contenidos originales - contacto
acerca de barrameda
un puente hacia contenidos originales...
 
 
Inicio
Principal
Noticias
Artículos
Colaboraciones
Blog
Puente Verde
Búsquedas
Registro
 
 
 
martes, 05 de noviembre de 2024
 
 

Ingresa el texto en la caja de búsqueda y luego pulsa Enter
Nube de tags

cambio climático extinción contaminación aumento peligro energía emisiones deforestación especies dióxido de carbono calentamiento global biodiversidad animales consumo bosques argentina nivel temperatura reducción explotación recursos calentamiento cambio inundaciones clima medio ambiente kyoto ecología climático protocolo global caza animal CO2 caracoles

Powered by RafCloud 2.0.2
 
 

Nombres tormentosos Imprimir E-Mail
Calificación del usuario: / 2
MaloBueno 
Publicado por Administrador   
domingo, 16 de octubre de 2005
HuracánWilma, el último nombre de la lista para los ciclones de esta temporada, podría usarse en cualquier momento antes del próximo 30 de noviembre, pues según los meteorólogos están latentes las condiciones para que se forme el organismo tropical 21 de esta temporada, e incluso podría suceder que se formara uno más.

De ocurrir esto, se agotarían los identificativos previstos para este año, aprobados con base en el Plan Operativo de Huracanes de la Asociación Regional IV para América del Norte, Central y el Caribe, edición 2001, de la Organización Meteorológica Mundial.

Al terminar estos nombres, que son 21 tomando en consideración que esa ha sido hasta el momento la cantidad máxima de ciclones en una temporada —la de 1933—, se ha tomado como acuerdo internacional que se prosigan bautizando las tormentas tropicales y ciclones con las letras del alfabeto griego, como Alfa, Beta...

Esta práctica de dar nombres a los organismos tropicales comenzó a extenderse a partir de la temporada de 1953, cuando los Estados Unidos abandonaron el plan de denominar las tormentas usando un alfabeto fonético, y ese mismo año la Oficina del Tiempo de Estados Unidos de América los llamó únicamente con nombres de mujeres.

Antiguamente en la región se estilaba utilizar los nombres del santo del día para identificar las tormentas, lo cual prestaba a confusión, porque cada país le daba uno distinto según el día en que fuera afectado.

Fue el australiano Clement Wragge, a finales del siglo XIX, el primer meteorólogo que utilizó un nombre propio para denominar un ciclón. Pero la práctica de darlo a los meteoros no se hizo común hasta la Segunda Guerra Mundial, cuando los meteorólogos del ejército norteamericano comenzaron a darle los de sus esposas, hijas y hasta amantes a los peligrosos fenómenos.

Sin embargo, más de 20 años después las féminas lograron romper el estigma de “tormentosas”, y en 1978 se incluyeron nombres de hombres en las listas de tormentas del Pacífico Norte, mientras un año después la Organización Meteorológica Mundial se encargó de extender esa iniciativa a todo el mundo.

El uso de nombres propios para designar cada huracán tiene que ver con lo necesario de su rápida identificación y seguimiento. Aunque existieron propuestas que incluían la utilización de números, letras, alfabetos especializados y otros más, ninguna ha demostrado ser tan eficiente como la actual.

Cada año, al finalizar la temporada ciclónica, expertos meteorólogos preparan una lista potencial de 21 nombres para la venidera temporada, utilizando los idiomas predominantes en la región (español, inglés y francés), la cual contiene un nombre por cada letra del alfabeto. No obstante, letras como la Q, U, X, Y, Z, no se incluyen, debido a que pocos nombres empiezan con ellas.

Las listas son utilizadas de nuevo cada seis años, aunque se reciclan retirándose de ellas el nombre de fenómenos especialmente destructivos, en cuyo caso se sustituye por otro que comience con la misma letra inicial.

Si bien el reglamento estipula que el viejo calificativo puede volver a usarse diez años después, a propuesta de los países afectados —que es aprobada por acuerdo de la Organización Meteorológica Mundial—, también puede retirarse definitivamente, como ha sucedido, por solo citar algunos ejemplos, con Camille (1969), Gilbert (1988), Andrew (1992) o Pauline (1997).

Lo que sí es una incertidumbre es qué pasará en lo que resta de temporada.
Amaury E. del Valle
Fuente: juventud rebelde
El último comentario se muestra en esta página, los anteriores podrás leerlos en las páginas subsiguientes:

Sólo los usuarios registrados pueden escribir comentarios.
Por favor valídate o regístrate.

Comentario[s]

Powered by AkoComment 2.0!

 
< Anterior   Siguiente >

 
 
Google
 
Web en.barrameda.com.ar
Puedes encontrarnos en
Facebook
Twitter
Ning
o recomendarnos en Google
Acordes Partituras Tablaturas Guitarra| Letras de canciones | Letras de canciones | Letras de canciones
El universo | Geografía Argentina | La biología | La botánica | La zoología | La ecología | What is ecology?

 
 

barrameda v2.3
Aviso Legal

website statistics
cargando el contenido