Durante la primera mitad del corriente año, se ha podido observar que la mayor cantidad de precipitación registrada en el país, se concentró en el noreste del territorio argentino, en el este de la zona central y en el noroeste de la Patagonia.

El campo de las anomalías de la precipitación fue evolucionando gradualmente en el transcurso de ambos meses, llegando a manifestarse una anomalía positiva muy marcada en el noroeste de nuestro país y en el este de la región central.

Por el contrario, en la región que abarca las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fé, se observó una intensa anomalía negativa, la que se extendió hacia toda la región del Litoral. Su valor máximo correspondió al noreste de la provincia de Corrientes.

En el área de la Cuenca del Plata, los campos de precipitaciones correspondientes a enero y julio, mostraron que los valores máximos se registraron en el noroeste de nuestro país, y que se extendieron hacia el norte de esa Cuenca.

El campo de anomalías fue positivo en las zonas de máximos registros pluviométricos. En el este de la Argentina se destacó una anomalía negativa, que fue intensificándose hacia el sur de Brasil y el norte de Uruguay, con su centro en el noreste de la provincia de Corrientes.

De la comparación entre las imágenes satelitales que se muestran a continuación (satélites NOAA-AVHR, banda del infrarrojo medio), obtenidas en los meses de mayo de 2005 y setiembre de 2006, surge que se produjo una disminución del agua superficial en el norte de la provincia de Corrientes así como en las provincias de Santa Fé y Entre Ríos, y sobre el río Uruguay.

Durante el corriente año, los niveles hidrométricos medidos sobre el río Uruguay a la altura de los puertos de Monte Caseros y Concordia, se han ubicado siempre por debajo de las alturas promedio históricas, habiéndose notado que desde el mes de mayo se acentuó la diferencia existente entre las alturas correspondientes a ambos puertos.