Ya una buena parte de la población del Chaco a oído la expresión PCB y que esas sustancias son altamente venenosas y contaminantes.

Tenemos que aclarar que dichos compuestos químicos denominados PCB o DPC se sabe que se utilizan principalmente en los transformadores eléctricos.

Estos bifenilos policromados periódicamente cobran notoriedad publica, por hechos graves que afectan a personas. Pero el tema es prontamente tapado por los gobiernos, sus funcionarios, etc. No se ha informado a la población de la utilización de dichos venenos en elementos de uso cotidiano. Dichos elementos -de acuerdo con las leyes- deberían tener un etiquetado bien visible identificando que su contenido.

Aquellas personas relacionadas con el tema ambiental, en especial las del área de servicios eléctricos de generación, distribución y transporte, saben de su existencia y de los riesgos derivados, desde hace ya bastante tiempo.

Este liquido aislante y refrigerante, tiene excelentes propiedades dieléctricas, baja presión de vapor y alto punto de inflamación.

Además posee una alta estabilidad química. Esta estabilidad juega un papel importante en la peligrosidad de esta sustancia, ya que, al ser dispersado en el medio ambiente no es degradado y permanece durante períodos de tiempo muy largos, sin descomponerse. No es biodegradable. Es difícilmente soluble en agua, pero lo suficiente para ser absorbidos por los pastos que luego come la vaca y se acumula
en la leche (son liposolubles), la mismas que damos a nuestros niños.

Otro riesgo del PCB, radica en que en determinadas condiciones da lugar a la formación de dioxinas. Estos compuestos son aún más tóxicos que el propio PCB. Se pueden observar, por exposición crónica o periódica, difusiones reproductivas, casos severos de cloracne, hiperpigmentación, dolores de cabeza, fiebre, problemas visuales y respiratorios, lesiones cutáneas, etc.

Esta prohibido el uso de esta sustancia y se ha ordenado su eliminación dentro de estrictas medidas de seguridad, pero todavía habría en el Chaco y existen transformadores y otros artefactos eléctricos con PCB.

Cabe preguntarse por la permanente negativa de la empresa estatal (que tiene el monopolio del servicio de energía eléctrica) a decir la verdad, admitiendo que por lo menos hasta el año 2003,  existían esos transformadores en operación.

¿Cuáles son las normas y reglamentación de la empresa estatal al respecto?. ¿Se han publicado?. ¿Están a disposición del público?.

Parecería que todo es una burla y que los gobernantes y los funcionarios y profesionales de la empresa monopólica se olvidan de la constitución provincial y de las leyes existentes y de aplicación, incluyendo el código de faltas de la provincia. Pero también es lamentable la poca participación del Ministerio de Trabajo de la Nación,  que debería velar por el cumplimiento de la Ley de Higiene y Seguridad en el Trabajo, los decretos y resoluciones derivadas. Y no olvidemos a los Ministerios de Salud, tanto de la Nación, como de la Provincia.

Es evidente que debemos conocer a nuestro común enemigo para vencerlo con las herramientas capaces de derrotarlos: información y educación.

Derechos de la Ciudadanía, ONG que presido, por trascendidos y ante la denuncia de distintas personas, ciudadanos de Sáenz Peña,  suponemos la muerte de varias personas a causa de la acción de este agente contaminante,

Hemos presentado un  pedido de informe a Secheep (Empresa Distribuidora de Energía), el que nunca contestaron, respecto a qué refrigerante poseen los transformadores en cuestión. Hemos presentado una denuncia en el Juzgado de Turno Nº 6, donde se archivó la causa por considerar que nosotros no éramos parte. Burocracia que poseen los juzgados para no investigar cuando los intereses afectan a  determinados políticos de turnos.

Elio Montivero