![Bolsas "biodegradables"](images/news14/bsadeg00.jpg)
Los materiales Oxo-biodegradables (Oxi-biodegradables), en realidad no son totalmente biodegradables, aunque si se degradan, la European Plastics Recyclers Association, alerta sobre los riesgos que conllevan el empleo de materiales que hacen pensar que son biodegradables, cuando en realidad al degradarse sueltan materiales altamente tóxicos, entre los cuales está el material plástico que se descompone en micropartículas que contaminan durante cientos de años la tierra.
Al parecer gran parte de las bolsas biodegradables únicamente combaten la contaminación visual, pero terminan siendo más perjudiciales para el ambiente.
Symphony Technologies, alega que las bolsas se integran perfectamente al ambiente,minimizando el impacto nocivo a la tierra y organismos vivos.
La tecnología de aditivos oxo-biodegradable presume de convertir el material en dióxido de carbono, agua y biomasa, cuando en la realidad, la mayoría de las empresas que la desarrollan, usan plásticos no degradables, ergo, los residuos que sobreviven a este proceso son altamente contaminantes, entre los cuales encontramos Cobalto en concentraciones mayores de 4,000 mg/kg.
Un químico Oxo-degradable, en realidad es un aditivo poliolefina (Polimero base carbono) que ayuda a degradar un material al cual se agrega, en el caso de las bolsas de supermercados como Wal-Mart, están compuestos de sustancias altamente perjudiciales para el medio ambiente como el Polietileno, al desintegrarse, permanece en la tierra durante cientos de años y si se descompone como ocurre en el mar, suelta sustancia venenosas que terminarían, con el actual volumen de basura, contaminando millones de hectáreas en muy poco tiempo.
Entre sus defectos ya mencionados por la European Plastics Recyclers Association, está que rompen con el ciclo de reciclaje del plástico.
Tampoco se sabe cual será el impacto sobre el mar si estas partículas y químicos llegan a los océanos.
Con la reciente prohibición de bolsas de plástico en los supermercados en el D.F. cabría preguntar si sería mas efectivo que bolsas de tela y cartón fueran distribuidas para su venta entre los consumidores y así dejar que sea la población la que tome conciencia del terrible problema que representa el plástico en todas sus modalidades.
De otra manera pasa lo mismo que con el recorte de agua del sistema Cutzamala, donde una señora se enoja de que no alcance el agua, exigiendo que saquen el agua de otras fuentes, aunque dichas fuentes no existan, la contaminación permanecerá mientras se limite a las acciones del gobierno y no de la población que a todas luces es la responsable del problema.