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| Los
distintos frentes han obligado
casi al mismo despliegue
de personal que hubo en
2000. |
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El castigo de las
llamas continúa azotando los
campos sureños. A pesar de
que la temporada recién empieza,
ya se han producido unos 58 incendios
en los departamentos de San Rafael,
General Alvear y Malargüe. Toda
la región se ha transformado
en una zona de alto riesgo por las
condiciones climáticas, y la
sequedad de los pastos. Desde el domingo,
ya se han quemado 75 mil hectáreas,
la mayoría aún continúa
ardiendo.
Los expertos de
la Dirección de Recursos Naturales
Renovables como los brigadistas de
Defensa Civil no bajan los brazos
y le pelean al fuego centímetro
a centímetro para ganarle terreno
y evitar desastres mayores, como la
pérdida de vidas humanas y
ganado.
En la zona de Gaspar
Campos, en General Alvear, una tormenta
eléctrica que se desató
el domingo inició un nuevo
foco, alrededor de las 14.30. Un rayo
provocó las primeras llamas
en el paraje conocido como Ituzaingó
y fue extendiéndose, devorando
a su paso algarrobos y jarillares,
quemando cerca de 28.000 hectáreas.
La noche del lunes, el frente del
fuego abarcaba entre 18 y 22 kilómetros,
divisándose el resplandor rojizo
a la distancia. Allí, cerca
de un centenar de personas combatía
ayer el incendio.
Esta lucha era protagonizada
por unos 23 brigadistas de Recursos
Naturales de San Rafael, Alvear y
de Mendoza, a los que se sumaron 10
personas del Plan Nacional del Manejo
del Fuego que arribaron desde El Bolsón
(Río Negro) y unos 20 hombres
de Vialidad Provincial de Villa Atuel
y Alvear, con 3 motoniveladoras y
varios camiones cisterna. Otro grupo
numeroso lo integraban los propietarios
de los campos damnificados y sus peones.
“No tenemos
que lamentar pérdidas de vidas
humanas y todavía no podemos
determinar si se quemó ganado
o no. Las características de
este foco nos recuerda a los terribles
incendios del año 2000, como
el de la estancia San Eduardo”,
contó el coordinador provincial
de Incendios Forestales de la DRNR,
Guillermo Ferraris. Para este experto,
las condiciones climáticas
eran el principal adversario al momento
de enfrentar el fuego. “Tenemos
viento moderado del sudoeste, de 28
k/h, con probabilidad de formación
de tormentas. De seguir así
la situación se complica aún
más porque cambiaría
la dirección del viento”,
explicó Ferraris. Ya el monstruo
ígneo devastó lo que
quedaba de la vieja estación
de ferrocarril de Gaspar Campos y
seguía avanzando.
Mientras tanto,
otros 5 focos se desataron en diferentes
puntos de la región. En la
zona de Carmensa se reactivó
la tarde del lunes un incendio que
había sido controlado hace
10 días quemando unas 23.000
hectáreas.
En la Ruta 40 Sur
ardieron unas 11.000 hectáreas
de vegetación de rápida
recuperación, como el coirón,
a la vez que en el distrito sanrafaelino
de Malvinas se originó un incendio
que fue extinguido.
El lunes al mediodía,
empezaron a arder unas 12.000 hectáreas
de campos en Cuadro Benegas (San Rafael),
a unos 120 kilómetros de la
ciudad, en los parajes conocidos como
Ramblón de los Guanaqueros
y Los Juncalitos, además del
puesto de Gil y los terrenos de González.
En estos últimos murieron ovejas
y chivos que quedaron encerrados por
las llamas, mientras que 8 brigadistas
de Defensa Civil ayudado por los dueños
de los campos combatían el
siniestro. En el paraje de Cañada
de los Loros, en Villa Atuel, a unos
40 kilómetros del centro sanrafaelino,
las llamas acabaron con 900 hectáreas
propiedad de Illescas, donde ayer
permanecía una guardia de cenizas.
27 de noviembre de 2002
Fuente: 
PÁGINAS
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