El Servicio Nacional
de Sanidad y Calidad Agroalimentaria
(SENASA) informó que la plaga
Sirex noctiles, conocida como avispa
barrenadora de los pinos, podrá
ser controlada por primera vez con un
insecto nemátodo que actúa
como controlador biológico y
por lo tanto no contaminante, en un
programa que se lleva a cabo en la provincias
de Neuquén y Río Negro.
La avispa barrenadora de los pinos
es una plaga fitosanitaria que afecta
a las producciones forestales, limitando
el desarrollo las plantaciones en
la región patagónica
y la apertura de nuevos mercados para
la exportación de maderas.
Los países que no tienen la
plaga fijan requisitos que limitan
el ingreso de la producción
nacional a otros mercados y para mitigar
este riesgo se realizan tratamientos
de secado a horno que elevan el costo
de la producción nacional.
La adaptación de este insecto
se logró a través de
un programa científico conjunto,
dentro del Plan de Contingencia Binacional
2003-2004, que llevan adelante el
Servicio Agrícola Ganadero
(SAG) de Chile y el SENASA, con el
aporte privado de la Corporación
Forestal de Neuquén (CORFONE).
El trabajo efectuado en las plantaciones,
donde la existencia de esta avispa
ocasiona pérdidas estimadas
entre el 20 y 30 por ciento de la
producción, incluyó
la inoculación de 700 plantas
con el nemátodo Delademus siricidícola
en forestaciones de pinos.
También se instaló
una red de monitoreo en la región
de 205 trampas, que permitió
conocer el grado de dispersión
de avispa barrenadora, determinar
el estatus de la plaga y proveer el
material necesario para la inoculación
en las temporadas 2003-2004.
La región patagónica,
integrada por las provincias de Neuquén
Río Negro, Chubut y Santa Cruz
cuenta con aproximadamente 49 mil
hectáreas de coníferas
en el área de la precordillera.
Del total forestado en pinos, 45.000
hectáreas pertenecen a Neuquén,
predominando las especies Pinus poderosa,
Pinus contorta y Pinus radiata.
28 de Junio de 2003
Fuente:
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