Según
un estudio, la contaminación
que generan los autos daña
la calidad de los espermatozoides.
Alerta a las autoridades.
Un estudio realizado
con trabajadores de peajes de autopista
indica que la contaminación
provocada por el tráfico deteriora
la calidad de los espermatozoides
en hombres jóvenes y de mediana
edad. Los investigadores, un equipo
de la Universidad de Nápoles,
afirman que su trabajo debería
impulsar estudios en otros tipos de
trabajadores expuestos a niveles similares
de contaminación y alertar
a las autoridades respecto de los
perniciosos efectos sanitarios que
supone la contaminación.
Michele de Rosa y sus colaboradores
compararon la calidad del semen de
85 trabajadores de peajes de autopista
con otros 85 varones de edades similares
residentes en la misma área
(grupo control). Aunque descubrieron
que el cómputo de espermatozoides
y los niveles de diversas hormonas
(la estimuladora del folículo
o FSH, la luteinizante o LH y la testosterona)
en sangre se encontraban dentro de
los valores normales en ambos grupos,
en los trabajadores de peaje todos
los demás parámetros
espermáticos estaban alterados
y por debajo de los niveles adecuados
establecidos por la Organización
Mundial de la Salud. Los trabajadores
de peaje tenían una motilidad
total de los espermatozoides, incluida
la progresión hacia delante,
significativamente más baja,
así como niveles más
bajos en otras pruebas de función
espermáticas.
Excepto en el caso del dióxido
de carbono, los niveles medioambientales
de contaminantes ocupacionales en
los peajes eran superiores a los máximos
legales, y los trabajadores estaban
expuestos a niveles más altos
de plomo, óxidos de nitrógeno,
óxidos de azufre y monóxido
de carbono que los del grupo control.
Aunque los niveles de marcadores toxicológicos
estaban dentro de los valores normales,
en los trabajadores de peaje descubrimos
niveles significativamente más
elevados de cuatro marcadores particulares:
metahemoglobina, sulfahemoglobina,
plomo en sangre y protoporfirina de
zinc, explica De Rosa.
Los análisis llevados a cabo
por los investigadores determinaron
que los óxidos de nitrógeno
y el plomo eran los que con mayor
probabilidad dañaban el esperma.
Se daba una correlación inversa
entre el cómputo de espermatozoides
y los niveles de plomo en la sangre;
otros parámetros estaban inversamente
relacionados con el marcador del nivel
de óxido de nitrógeno:
la metahemoglobina.
El estudio, publicado en Human Reproduction,
se realizó en una población
homogénea de varones jóvenes
y de mediana edad expuestos a gases
de vehículos durante seis horas
al día. Aunque el cómputo
de espermatozoides no difería
significativamente en el grupo de
estudio y el de control, en general,
los espermatozoides del grupo de estudio
eran más débiles y menos
activos, por lo que el potencial de
fertilidad disminuía,
dice De Rosa.
La investigación mostró
que aunque los niveles de plomo en
la sangre no eran tan elevados en
los trabajadores de peaje como los
encontrados en estudios realizados
con trabajadores de fundiciones, la
exposición moderada pero continua
a este metal entre los trabajadores
de peaje deterioraba el esperma, mientras
que el deterioro de la función
relacionado con los niveles de metahemoglobina
sugería que los óxidos
de nitrógeno también
causaban daño.
El estudio demuestra que la
continua exposición a los contaminantes
producidos por el tráfico deteriora
la calidad espermática en varones
jóvenes y de mediana edad.
Analizar la fertilidad de estos trabajadores
añadirá más información
importante, opina De Rosa. Aunque
será necesario investigar más
para determinar las modificaciones
inducidas por cada contaminante, esperamos
que nuestros resultados fomenten estudios
clínicos y epidemiológicos
sobre la infertilidad masculina en
otras categorías laborales.
Mientras tanto, las autoridades sanitarias
deberían estar alerta ante
los perniciosos efectos de la contaminación
medioambiental, concluye.
26 de mayo de 2003
Fuente:
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