Hasta hace muy poco tiempo los científicos creían que existía una sola especie de orca (Orcinus Orca). Hoy se acepta, definitivamente, la existencia de una nueva especie conocida como «Acuarius Orca» cuyo nombre vulgar sería «orca de acuario»
Estos extraños animales tienen algunas diferencias sustanciales, producto de diversas mutaciones, con las orcas en libertad de las que se asegura que provienen. En primer lugar la aleta dorsal, que en la especie conocida como «orcas libres» se encuentra erguida y erecta, se presenta en esta nueva especie caída hacia un costado con apariencia de haberse fracturado o sufrir un permanente estado de flacidez.
Además, las «orcas de acuario» parecen carecer de ciclos reproductivos ya que nunca tienen crías y eso termina deformando por completo el concepto de familia en el que viven sus parientes las «orcas libres». De todos modos, la numerosa familia no tendría lugar en las pequeñas piletas en las que se encuentra a la nueva especie. Las «orcas de acuario» presentan, además, un ojo más pequeño que sus semejantes libres. Algunos estudios coinciden que esto puede tener relación directa con el gran contenido de cloro que posee su hábitat.
Por otro lado, las «orcas de acuario» presentan conductas extrañas y altamente sofisticadas como golpear pelotas en el aire o trasladar seres humanos sobre su lomo. Estas conductas tal vez tengan su explicación en algún tipo de alteración mental producido por el incesante rebote de los sonidos de alta frecuencia de su ecolocalizador en las paredes de cemento del hábitat. Además, el pedúnculo caudal (base de la cola) de esta nueva especie sufre cierto grado de atrofia muscular.
Algunos científicos coinciden en que esto es provocado por el hecho de que esta especie sólo come peces muertos y no necesita impulsarse a velocidad como las «orcas libres» para cazar. Pero otra teoría explicaría esta atrofia con el bajo grado de desplazamiento de estos individuos en relación con sus antecesores libres que viven en un hábitat de varios cientos de kilómetros cuadrados. Finalmente, una característica de este nuevo grupo es que su promedio de vida es de sólo 5 a 8 años mientras que la especie «orcas libres» presenta un promedio de vida de 50 a 80 años.
En todo el mundo han surgido grupos humanos dispuestos a luchar por lograr la definitiva extinción de ésta nueva especie. Algunos de ellos están tan organizados que se puede encontrar sus páginas en Internet.
Uno de los grupos argentinos más conocidos es Fundación Cethus www.cethus.org
Los individuos que conforman estos grupos luchan incansablemente para lograr que los gobiernos cambien las leyes que protegen a las «orcas de acuario» asegurando que de ser liberadas, éstas sufrirían una nueva mutación casi instantánea que las llevaría a convertirse nuevamente en «orcas libres»
«No se puede defender lo que no se ama y no se puede amar lo que no se conoce»