Nombre científico: Chrysocyon
brachyurus.
Otros nombres vulgares: Lobo
de crin. Lobo rojo. Lobo crinado.
Lobo o zorro de los Esteros. Zorro
grande. Lobo colorado. Lobo dorado.
Guara.
Descripción general y características
Es un animal corpulento,
de manos y patas largas. La coloración
del pelaje es pardo y rojiza, con
negro en el hocico, la parte inferior
de las manos y de las patas y una
línea a lo largo del lomo.
Presenta dos manchas blancas, una
en la garganta y la otra en el extremo
de la cola. La cabeza es alargada
y las orejas son grandes. Los dedos
tienen uñas y las almohadillas
plantares son grandes. Los pelos del
cuerpo son largos, de 9 a 10 cm.,
pero en la región de la cruz
miden más, hasta 14-15 cm.
Causas de su
disminución
La desaparición
de los ejemplares de la especie se
debe al creciente avance del hombre
sobre su hábitat, que poco
a poco los esta haciendo retroceder
en evolución.
Este animal además,
también es victima de las creencias
populares, ya que se lo confunde habitualmente
con el lobizón
(especie de hombre lobo), motivo por
el cual es perseguido y cazado impunemente.
Curiosidades
- Los huesos pulverizados
alivian al parto de una mujer.
- Las tabas ayudan a escapar a un
fugitivo de la justicia.
- Los cojinillos hechos con el cuero
previenen y curan las hemorroides.
- Las personas que se tapan con el
cuero, se calman de los dolores producidos
por los cólicos y las artritis.
- La piel era utilizada en la confección
de calzados y cojinillos y con los
huesos de las patas se hacían
puntas de flecha.
Leyenda
En la narrativa popular, el Aguará
Guazú es caracterizado por
el "Lobizón". Esta
es una creencia de origen europeo,
donde el séptimo hijo varón
de una familia, durante las noches
de luna llena, se transforma en lobo.
Una leyenda cuenta que el Aguará
Guazú es el padre de los perros.
Esto se debe a que se cree que alguna
vez se asoció con el Gato Montés
para conseguir alimento. Luego aceptaron
la compañía de la Iguana.
Al tiempo de andar juntos, la iguana
se portó mal y discutió
con el gato. El aguará trató
de calmarlos, pero la pelea fue muy
intensa y el gato murió. En
venganza, el destino dispuso que los
aguará o los perros siempre
persigan y cacen a las iguanas.
|