Las implicancias de la explotación minera en Esquel

‘Vienen por el Oro, vienen por todo’. El rechazo del pueblo al emprendimiento minero no es solo por el cianuro sino en defensa del patrimonio nacional.

Javier Rodríguez Pardo de la organización ambientalista MACH manifestó que el resultado del plebiscito realizado en Esquel, provincia de Chubut, “no fue solamente un NO al cianuro” sino que significa una toma de postura de los ciudadanos de Esquel en defensa del patrimonio nacional”. En el plebiscito realizado en marzo de este año, el 81% de la población rechazó la instalación de la mina de oro y plata que la empresa canadiense Meridian Gold pretende emplazar a nueve kilómetros de la ciudad de Esquel. Esta abrumadora mayoría es más relevante si se tiene en cuenta que el 70% del padrón concurrió a votar.

Javier Rodríguez Pardo, indicó que el proyecto de la mina de oro “es una estafa minera donde pretenden que el pueblo argentino termine pagándoles dinero a través de los reembolsos patagónicos”. Rodríguez Pardo advirtió que “no sólo vienen por el oro, vienen por todo. Porque también vienen por el agua, por nuestra biodiversidad. Sudamérica tiene el 75% de la diversidad biológica del planeta y se la quieren llevar. Nosotros tenemos uno de los últimos sitios de agua dulce del planeta en condiciones de ser consumida, además de tener la mayor extensión de hielos continentales”. Rodríguez Pardo indicó que “hay 250 emprendimientos mineros que se quieren desarrollar a la altura de la Cordillera de los Andes, en cercanías a Lago Pueblo entre el límite con Río Negro y Santa Cruz. En este momento hay 250 minas a punto de comenzar con la explotación minera de oro y de plata”. El duro cuestionamiento hacia los emprendimientos mineros, está contenido en la Resolución nº 4/03 que aprobó la Asamblea XXVI de la RENACE (Red Nacional de Acción Ecologista), y que se desarrolló a comienzos del mes de junio en la localidad de Vaquerías, Córdoba. Al encuentro asistieron 78 organizaciones ambientalitas no gubernamentales de 18 provincias del país quienes analizaron y buscaron soluciones para los problemas ambientales más graves de Argentina. En dicha Resolución RENACE manifiesta que la minería "es una de las actividades más dañinas para el ambiente y apoya e impulsa la lucha del pueblo de Esquel en su resistencia contra el despojo de minerales críticos y estratégicos, su reservas de agua, sus tierras y biodiversidad, que ponen en riesgo a las comunidades aborígenes con sus bosques y fauna nativa. RENACE exige se respecte el plebiscito que refleja la voluntad de los habitantes en el lema: NO es NO".

El impacto ambiental de la mina

En el informe técnico que FUNAM y la Cátedra de Biología Evolutiva Humana de la Universidad Nacional de Córdoba entregaron gratuitamente a los vecinos, Raúl Montenegro, presidente de FUNAM, indicó que la explotación de oro “iba a generar impactos sociales y ambientales de corto, mediano y largo plazo”. Destacó que uno de los efectos denunciados por el informe “era la destrucción irreversible de ambientes nativos ubicados en el área de explotación y zonas vecinas. No olvidemos que el proyecto de la Meridian Gold implicaba la destrucción de selvas frías pertenecientes a la Provincia Biogeográfica Subantártica. Si la gente de Esquel no paraba el proyecto, hubiesen desaparecido, seguramente, ambientes únicos y de alta biodiversidad magníficamente adaptados al frío y a los metabolismos bajos”.

En el informe técnico también se menciona el impacto en las alteraciones geomorfológicas de envergadura y la distorsión de cuencas hídricas superficiales y subterráneas. La mina de Cordón Esquel hubiera consumido inicialmente 18 litros por segundo de agua subterránea, luego tenía previsto obtenerla del tajo abierto y por último desde perforaciones ubicadas sobre la cuenca del Esquel Viejo. Montenegro agregó que esto habría provocado “una merma en la regularidad hídrica y en la cantidad de agua disponible por año y por estación. Hasta se podría haber desecado la laguna Esquel”. Otro de los impactos es el riesgo de contaminación con cianuro y metales pesados. El informe de FUNAM sostiene que las actividades de la Meridian Gold “habrían contaminado el agua superficial y subterránea, el suelo y los organismos vivos con residuos peligrosos. Lo grave es que los efectos no se limitan al corto plazo. Una vez concluida la explotación los residuos peligrosos actúan como bombas químicas de tiempo”. El biólogo Raúl Montenegro recalcó que si se hubiera instalado la mina “la distorsión irreversible de la imagen de naturaleza poco intervenida que tienen los ambientes patagónicos era inevitable”.

Un nuevo frente

Los vecinos de Esquel están dispuestos a movilizarse otra vez contra otro emprendimiento minero que la empresa canadiense "El Desquite" pretende instalar a cinco kilómetros de esa ciudad para la explotación de oro y cobre. El sitio tiene una superficie de 1.800 hectáreas y sería explotado por esta compañía minera que también es propiedad de la multinacional Meridian Gold. La comunidad de Esquel sigue exigiendo el retiro de la empresa canadiense de la ciudad y ahora amenaza con realizar nuevas movilizaciones populares frente a este nuevo intento de la Meridian Gold. La dirección de Minas de la provincia de Chubut registró formalmente este nuevo yacimiento a fines de abril de 2003, permitiendo a la minera canadiense iniciar la explotación minera después de hacer la mensura. Los vecinos advierten que el yacimiento se encuentra "en las puertas de la ciudad de Esquel y que gran parte de las casi 2.000 hectáreas están en el valle que desemboca en la laguna Willimanco, la reserva de provisión de agua para la ciudad en temporada estival. Hemos denunciado los problemas de contaminación de agua, los riesgos de la utilización de cianuro, los escombros y desechos tóxicos, como así también las leyes nacionales que benefician a las mineras extranjeras", señalaron Alejandro Corbeletto y Pablo Quintana, dos de los vecinos autoconvocados.

26 de agosto de 2003

Fuente: