|
Aspecto
de las playas junto al cabo
Finisterre. |
|
MUXIA, España
-- Manchas de combustible cubrieron
la costa del noroeste de España
el domingo, afectando varios poblados
y playas aunque no tanto como se temía,
al menos por el momento.
Muxia, poblado cerca
de Cabo Touranin, fue el primero afectado
hace dos semanas, poco después
de que el buque tanque "Prestige"
naufragó y derramó su
contenido durante una tormenta ante
la costa de Cabo Finisterre.
El domingo, las
olas superaron un muro de contención
de seis metros de altura, derramando
combustible sobre la calle. El petróleo
forma una capa de unos 25 centímetros
sobre la playa. Las cuadrillas de
limpieza usaron palas y rastrillos
para limpiar la playa de la capa de
hidrocarburos con la consistencia
de la jalea y oliendo a azufre.
"Estamos acostumbrados
a que el agua suba sobre la pared,
pero no a nada como esto", declaró
María Terrela, ama de casa
de 58 años.
En otros puntos
de la costa, el petróleo ennegreció
las playas y se concentró en
charcas, lagunas y riachuelos.
José Miguel
Suárez, de 24 años,
que trabaja en la limpieza de las
playas, dijo que la mancha es verdaderamente
espesa. Él y otras personas
en Nemia usaban mascarillas y trajes
especiales para retirar el petróleo
y colocarlo en pilas que eran levantadas
luego por maquinaria pesada.
"Este verano,
la playa estaba inmaculada",
dijo Manuel Sambade, de 45 años
y quien cría percebes, los
cuales se venden en España
a unos 30 dólares por kilo.
"Estaba llena de turistas. Ahora
es basura". "Es todo lo
que tenemos. Si nos quedamos sin ella,
¿qué vamos a hacer?",
dijo, señalando el mar desde
un café de este poblado de
200 habitantes.
El sábado,
fuertes vientos y corrientes marinas
llevaron una mancha de petróleo
cerca de la playa, pero abruptamente
la dispersaron en varias lenguas,
las cuales todavía amenazan
con contaminar los lugares de pesca
y varios puertos, bahías y
embarcaderos.
|
Marcha
por las calles de Santiago
de Compostela. |
|
Marcha de protesta
Los gallegos están molestos por
el desastre ecológico y económico
y critican lo que dicen fue una lenta
reacción de parte del gobierno.
Decenas de miles de personas participaron
en una marcha el domingo en la ciudad
de Santiago de Compostela.
Los gallegos temen la posibilidad
de tener malas cosechas durante años
a consecuencia de la contaminación
por el derrame, que ya ha obligado
a imponer una prohibición a
la pesca y recolección de moluscos
a lo largo de una franja de 500 kilómetros
de mar. Las dos actividades son la
principal ocupación de muchos
residentes del noroeste de España.
2 de diciembre de
2002
Fuente:
PÁGINAS
RELACIONADAS:
1 - 2
- 3
- 4
- 5
- 6
- 7
- 8
- 9
- 10
- 11
- 12
- 13
- 14
- 15
- 16
- 17
- 18
- 19
- 20
- 21
- 22
- 23
- 24
- 25
|